Santaia se encuentra en “Casal de Calma” una restaurada casa de labranza gallega originaria del siglo XIX restaurada conservando la estructura original. En ella el viajero encontrará la calma de una aldea tradicional gallega y un entorno donde disfrutar de los parajes naturales así como de las comodidades y delicias gastronómicas. Un lugar ideal para el descanso y disfrutar de paz y tranquilidad merecida.