Ochocincotres

De niño aprendí que las flores muestran algo más de lo que vemos a simple vista, su variedad de colores y formas o incluso su olor, solamente son una pequeña parte de su razón de ser.
Crecí rodeado de multitud de flores mezcladas con los más variados matices de verde, que crecian en el caótico jardín de mi abuela, carente en sí mismo de todo criterio paisajistico pero pleno de pasión y amor por ellas. Alli descubri que todo aquel caos de colores y formas, me hacía feliz.
Me sigo emocionando al recordar aquel pequeño jardín en mi casa de Galicia dónde fué creciendo en mí lo que hoy siento por estai profesión manteniendo vivo ese estado de felicidad que sentia de niño.

Un florista no sólo trabaja con flores, lo hacemos tambien con sentimientos y es precisamente eso lo que hace tan especial mi oficio.

Quiero compartir aqui lo que escribió la poetisa, novelista y jardinera británica Vita Sackville West:

<< Una habitación sin flores es una habitación sin alma, a mi entender; pero basta un pequeño jarrón solitario con una flor para redimirla >>