Fue constituida en 1975 por Bartolomé March Servera (Palma, 1917 - París, 1998). Educado primero en Palma y más tarde en Londres, Bartolomé March fue un hombre cosmopolita que aprovechó sus viajes para desarrollar una gran afición por las Artes. Sus padres, Juan March Ordinas y Leonor Servera Melis estimularon su sensibilidad artística y la dedicación al coleccionismo. Recogiendo el testigo familiar, se convirtió en un importante coleccionista y, sobre todo, experto bibliófilo.
Con la Fundación, quiso testimoniar su devoción por la cultura y su interés por el mecenazgo. La ubicación de la Fundación en la casa familiar de Palma nos habla de la estima y fidelidad a sus raíces.