Freeman Perruquers

UNA ILUSION HECHA REALIDAD
Tener mi propio negocio, poder vivir de mi pasión y oficio –la peluquería-
. En 1996 fundé “Barbería Aniki” ,era una chiquilla con veintiún añitos
poca experiencia con la navaja y con los temas fiscales. La juventud, la
ilusión, el reto de demostrarme a mí misma mi capacidad para levantar el
negocio, más difícil si aún cabe en un pueblo siendo una joven, me
incentivaba mucho más.
Con el apoyo incondicional de mi familia, echando muchas horas,
trabajando los primeros años a precios muy bajos, cuidando los pequeños
detalles con profesionalidad y empatía. Este establecimiento echó sus
raíces, permaneciendo cinco años en un lugar emblemático”La Fonda
Santa Digna” (el menjador Blau).
Los negocios como la vida misma, cogen un rumbo variable que te conducen por otros senderos aportándote un abanico de posibilidades. La burbuja inmobiliaria provocó que nos tuviéramos que trasladar a otro local de 120 metros cuadrados, habiendo partido de mis 25 metros cuadrados que incluían dos sillones de barbero y un lava cabezas de plástico,
Las posibilidades eran muchas y variadas, por lo que decidí hacer una prueba piloto durante los dos años que debería de estar allí, había que darle un nuevo giro al negocio, manteniendo su esencia y frescura y por su supuesto el servicio de barbería. Apareció con un aire fresco e innovador “Freman Perruquers”.
El motivo del nombre es que hacía el año 2000 la imagen personal masculina comenzó a tener protagonismo y aceptación, valorándose el cuidado personal y estético. La palabra metrosexual se expandió en adolescentes y caballeros, que descubrieron el placer de estimarse, al igual que los atrevidísimos looks de los gays marcando tendencias.
Con el fin de dar unos servicios más integrales comenzamos a ofrecer: estética, solárium, peluquería unisex, tatoo, piercing, posticería, análisis capilares, micro pigmentación, etc.
Pasados los dos años, regresamos a nuestros orígenes, al barrio que nos vio nacer, tanto nos quiere y admira por nuestra trayectoria y evolución. Continuamos ofreciendo todos los servicios menos: tatoo, piercing y la micro pigmentación, aunque hemos añadido otros como la depilación por laser y colaboraciones con grandes profesionales maquilladoras, fotógrafas como Joana Fotograf con la que hemos realizado performances, desfiles, colaborado en revistas, destacando nuestra participación como estilistas durante tres años consecutivos en la realización del calendario de bomberos de la Generalitat de Cataluña. Seguiremos evolucionando por y para vosotros.
Quiero cerrar ésta breve historia de los 16 años de Freeman Perruquers con mis agradecimientos personales: Los primeros en mi mente sois vosotros “mi familia Freeman”, mis niños, adolescentes, mayores, clientas/es. Gracias por facilitarnos nuestro trabajo y formar parte de nuestras vidas –así da gusto trabajar-. Para mí es una ilusión hecha realidad, gracias a vosotras/os puedo seguir soñando, no tengo palabras suficientes para expresar y resumir lo vivido junto a vosotras/os en estos años, solo me queda por añadir que es un placer ofrecer nuestro asesoramiento, entusiasmo y complicidad, formando parte de vuestros acontecimientos más entrañables y cotidianos, si así podemos contagiaros de magia vuestras vidas nos daremos por satisfechos.-siempre a vuestro servicio-.
Gracias a mi madre “La Tina”, una mujer emprendedora, alegre, luchadora y justa. entre otras cualidades que genéticamente agradezco, que está en éste pequeña empresa, aportándome seguridad, dinamismo y tendiéndome sus manos en todo momento.
Gracias “Tete” por darme ese empujón tan necesario al principio, por implicarte en todos mis proyectos y eventos psíquica y físicamente por muy arriesgados que parecieran, siendo siempre la parte más racional y creativa, tan necesaria en un negocio –testimuu Tele-.
Hay dos personas que me han dejado huella en mi vida y en la Freeman y son: Raquel Molina con la que he vivido muchos cambios profesionales y personales, caminando juntas durante años, estoy muy orgullosa por su esfuerzo profesional, es una gran maquilladora y mejor como persona –te quiero mi niña-. Sarai Carvajal entró en la peluquería con un brillo en la mirada y sonriente, realizando cursos de automaquillaje y en un año me demostró su capacidad profesional en la primera performance, haciéndose cargo de su equipo y todos los bodypeintings estando aún en la escuela aprendiendo, me abrió su corazón y su casa .te quiero gordi-.
Como final y en especial quiero hablaros de Ester Pujal, entró muy jovencita en la peluquería, casi no hablaba, con un corazón silencioso, una voluntad y una capacidad de aprendizaje digna de admirar. Después de ocho años es mi mano derecha dentro y fuera del trabajo, positiva y creativa entre otras cualidades, a la que admiro personal y profesionalmente –testimuu Cuca-
No somos peluqueros de pelos…somos asesores de imagen y peinamos almas
Ana