Destacamos de la casa sus instalaciones, pensadas para aprovechar los recursos naturales y aumentar el ahorro energético. Su cuidada decoración recuerda a la tradicional casa de labranza.
La casa dispone de dos plantas. En la primera, encontramos el zaguán que comunica con un distribuidor que da acceso a un aseo, la cocina, el salón comedor y una amplia terraza descubierta con barbacoa y la escalera de acceso a la planta segunda, donde se encuentran las cuatro habitaciones.
El exterior de la finca está rodeado de olivos, y dispone de una parcela donde se está desarrollando un pequeño huerto y una granja avícola.