EMINA

EMINA, más que un vino. Ribera del Duero, Rueda, Cigales. #temerecesemina

Cuando hablamos de Emina, no sólo nos referimos a una bodega arraigada en la idiosincrasia del Duero, desde los remotos tiempos de los Vacceos hasta los monjes cistercienses del Monasterio de Santa María de Valbuena. Además de historia, Emina es Arte, Emina es Cultura y una de las referencias más significativas del Anillo de Oro de la Ribera del Duero Española. Tradición y modernidad se complementan para dar ese toque de excelencia que diferencia a Grupo Matarromera.

Arte

En pocos kilómetros a la redonda, el Museo Vitivinícola EMINA, se constituye como un punto de partida idóneo para conocer en profundidad al Arte que de estas tierras emana.

Cultura

El mundo del vino, va más allá de la propia elaboración de estos caldos, es una cultura. Los orígenes del vino en estas tierra, proceden de los Vacceos. En el yacimiento arqueológico de Pintia, cercano al Museo EMINA han aparecido vestigios que confirman el origen del vino. Atio, es la primera referencia que se tiene del mundo del vino en esta zona. Ya en el Siglo XII (1143) , los Monjes Cistercienses, que habitaban el Monasterio de Santa María de Valbuena, trajeron la variedad de uva tempranillo. El yacimiento de Pintia, cercano a EMINA, ha descubierto en los últimos años multitud de restos relacionados con el cultivo del vino.

El Museo EMINA, nace con la voluntad de convertirse en un lugar de referencia de la Ribera del Duero. Ésta Denominación de Origen, es conocida mundialmente por sus afamados vinos, pero no lo es tanto a nivel Enoturístico. Es aquí donde el Museo EMINA va a cubrir el vacío existente.

La Concepción de EMINA, va mucho más allá de una “Bodega”, ya que abarca otra serie de campos, que complementarán la elaboración de los vinos de EMINA.

Arquitectónicamente, la bodega es de estilo tradicional teniendo como origen las antiguas construcciones romanas, con una construcción alrededor del Atrium central con claras influencias de Paladio. El edificio busca el equilibrio entre la forma y la funcionalidad. La construcción destaca por la elegancia y la funcionalidad de las que se ha querido dotar a este Centro.

Para llevar a cabo este proyecto, importantes empresas del sector de la construcción y de la ingeniería se han unido para dar vida a un nuevo desarrollo arquitectónico, que supone el desarrollo de las nuevas instalaciones de la Bodega Emina, situada en la localidad vallisoletana de San Bernardo.

El Centro se encuentra en una parcela de 35.000m2, de los cuales la Bodega ocupa 10.000 m2, a los que hay que añadir los accesos y los aparcamientos. La estructura está formada por pilares de hormigón, vigas de gran luz de hormigón y pórticos de madera laminada. La zona de embotellado, se encuentra cubierta de una gran cúpula de cristal.

Para el primer trimestre del año 2006 la nueva Bodega EMINA, estará inaugurada.

Los visitantes, podrán seguir todo el proceso de elaboración del vino, desde sus orígenes hasta la última fase, el embotellado y la guarda a través de un claustro. El último proceso, el embotellado, se realiza bajo una pirámide de cristal

Jardín de variedades

El origen del vino, es la tierra, de ahí brotan las diferentes variedades de uva, que luego nos encontraremos en los distintos caldos. Cada una de éstas tiene sus peculiaridades. En el Museo EMINA, queremos comenzar visitando el Jardín de las Variedades, en el que encontrará más de 70 variedades.