Entrad y respirad. Podemos sentir el aire de tiempos antiguos, tiempos ya pasados. Antiguas botas centenarias enteras presiden la gran sala de techos elevados. Bienvenidos a uno de los más antiguos “cellers” de Mallorca.
Can Amer ha recogido el legado de aquellos establecimientos tradicionales donde sólo se vendía vino y donde luego comenzó a germinar la cocina mallorquina en formato de restauración.
El chef Tomeu Torrens ha heredado de sus padres la devoción por la buena cocina y la gestión del restaurante en el que se marida la tradición y la innovación.