Se trata de una construcción típica de Bernardos, donde pizarra y madera son las dos grandes protagonistas de la casa. Gracias a su estructura de paredes muy anchas, se mantiene fresca en verano y es fácil de calentar en invierno.
Hemos combinado pasado y presente, cuidando con detalle que los elementos arquitectónicos se integren en la vida y decoración de la casa, consiguiendo de esta manera que su estancia en la misma resulte agradable y acogedora.
Dispone de un amplio y verde jardín donde adultos y niños podrán disfrutar de agradables jornadas al aire libre en un ambiente tranquilo y relajado. Lugar para el relax, la lectura, juegos tranquilos para los niños o una buena barbacoa para su disfrute pleno.
Con sus grandes ventanales hemos conseguido que la luz sea otra gran protagonista, invadiendo todos los espacios de la casa a cualquier hora del día.