Escuchad mis palabras, sed testigos de mi juramento... Los exámenes se avecinan, ahora empieza mi llanto. No terminará hasta el día de mi graduación. No tomaré amigos en física, no poseeré aprobados, no engendraré matrículas. No llevaré corona, no alcanzaré la gloria. Viviré y moriré en mi puesto del búnker. Soy la chuleta en la oscuridad. Soy el empujasillas de Muro. Soy el rigor que arde contra la física, el red bull que me mantiene hasta el amanecer, el burn que despierta a los durmientes, el escudo que defiende los reinos del álgebra. Entrego mi vida y mi honor al Aula de Cultura, durante este año y todos los (muchos) que estén por venir.