Para cuidar tu salud comienza por cuidar tu alimentación. No es necesario que nos obsesionemos con llevar una alimentación demasiado estricta, basta con que procuremos llevar una alimentación sana y equilibrada para que nuestro organismo funcione correctamente.
Estas son las principales claves:
• Come variado para recibir todos los nutrientes.
• Mucha fruta y verdura, más pescado y más carne blanca que carne roja.
• Las grasas saturadas sobran en tu dieta, reduce al mínimo pastelería y golosinas.