Archivo Histórico de Coria

Historia del Archivo y del Edifico que lo alberga


Los fondos del Archivo Municipal de Coria se han guardado, desde que hay constancia, en el edificio conocido como el Ayuntamiento Viejo o Antiguo Consistorio.

En 1981 se traslada el consistorio al Ayuntamiento Nuevo y los fondos pasan al Archivo Histórico Provincial de Cáceres, aunque la primera vez que entraron documentos del Archivo Municipal de Coria en el Archivo Provincial fue el 18 de marzo de 1950. Todavía en diciembre de 1966 hubo otro traspaso de fondos con Pedro Rubio Merino como Director del Archivo Provincial de Cáceres y Antonio Matilla Tascón como Inspector de Archivos.

Una parte de los fondos se mantiene almacenada en los Antiguos Juzgados de Coria y, posteriormente, todavía en los años ´80, pasarán a guardarse en el patronato de Formación y Empleo, antes conocido como Escuela Taller.

Durante el año 2000-01 se realizan obras de adecuación y adecentamiento del Patronato de Formación y Empleo, poniéndose en contacto el director de dicho patronato, José María Barrera, con el director del Museo de la Cárcel Real de Coria, para efectuar un nuevo traslado de los documentos al Museo, donde finalmente permanecen en la Sala de Reserva o Conservación.

En ese mismo año se realiza la limpieza de los documentos y se constata que pertenecen al fondo del Archivo Histórico Municipal.

En el año 2003 comienzan las labores de catalogación y digitalización del Archivo Histórico Municipal de Coria, realizándose una segunda campaña en el año 2005 y acabando los trabajos en el año 2010.

El edificio donde se conservan estos fondos, y que se conoce como la Cárcel Real, se encuentra situado en la Calle de las Monjas, al lado del centro neurálgico e histórico de la ciudad. Se empezó a construir en 1686 por Alonso Hernández de Garrovillas sobre lo que antes era una prisión. Está construida con fábrica de ladrillo cocido, reforzada en sus esquinales, ventanas y puertas con piezas de granito.

El edificio se compone de dos plantas, situándose en las dependencias posteriores de la planta superior la zona administrativa y de trabajo del museo, ahí es donde está la sala de conservación del museo que alberga los fondos del Archivo Histórico Municipal de Coria.

El resto del edificio está destinado a ser Museo Arqueológico, etnográfico y cultural, desde que en los años ´80 fuera restaurado, ya que antes se llegó a utilizar como calabozo municipal.

La ciudad de Coria desde su fundación constituye un núcleo de referencia de la zona noroeste de la provincia de Cáceres, no sólo a nivel estratégico y militar, sino también desde el punto de vista administrativo. No cabe duda de la importancia de la ciudad como entidad que cohesiona el territorio ligado al río Alagón.


Desde finales del s. XII y principios del s. XIII, época en la que a la ciudad se le otorga su condición de aforada, dependiente exclusivamente de la corona, el territorio se organiza y se vertebra en tres zonas geográficas diferenciadas, pero dependientes entre si, y con un centro administrativo en Coria.


Estas zonas, conocidas como sesmos, agrupaban a una serie de localidades (algunas hoy desaparecidas) que debían pagar sus impuestos y realizar todo tipo de gestiones de nivel general (levas militares, repartimientos de tierras, deslindes, pleitos, etc.) en Coria. Estas zonas eran tres: el sesmo de la Jamarga, el sesmo del Llano y el sesmo de la Sierra, estos tres sesmos constituían durante los siglos XVI a XVIII el Partido de Coria, que estaba integrado por las siguientes localidades: Acebo, Aceituna, Ahigal, Aldehuela, Bronco, Cachorrilla, Calzadilla, Carcaboso, Casar del Palomero, Casas de Don Gómez, Casillas de Coria, Cerezo, Galisteo, Guijo de Coria, Guijo de Galisteo, Guijo de Granadilla, Holguera, Hoyos, Huélaga, Marchagaz, Mohedas, Motehermoso, Morcillo, Nuñomoral, Palomero, Pedroso, Perales, Pescueza, Pinofranqueado, Portaje, Pozuelo, Rivera de Oveja, Riolobos, Santa Cruz de Paniagua, Santibañez, Torrejoncillo, Valdeobispo, Villanueva de la Sierra y Zarza.


Todas estas localidades ya las recoge el Fuero de Coria en lo que denomina la “Tierra de Coria”. Las referencias documentales a dichos pueblos están recogidas en su mayor parte en el archivo de Coria, hasta sus respectivas independencias como villas, y sobre todo hasta la nueva configuración territorial a partir de 1833, fecha en la que se reorganizan los partidos judiciales.


No obstante, las poblaciones más cercanas, siguen ligadas administrativamente a la ciudad en algunos aspectos puntuales. Es evidente que cualquier estudio tanto histórico como estadístico referente a estas localidades pasa inexorablemente por el archivo de Coria, verdadero centro neurálgico de la zona.


Por todo lo expuesto, podemos considerar el Archivo Municipal de Coria, como un verdadero archivo comarcal, ya que la información que recogen sus diferentes expedientes es, sin lugar a dudas, esencial para el estudio de esta zona del noroeste de Extremadura.