Este Txakolí es el resultado de la unión mesurada de la tierra y del mar, de la tradición iniciada en 1830 y de la modernidad última, en un punto, desde el que es posible contemplar cualquier horizonte, desde la serenidad.
Tal virtud encarnó el marino ELKANO, natural asimismo de Getaria, quien dio la vuelta al mundo, y da ahora nombre a esta bebida, elaborada en propiedad por la Familia Zimmermann-Alkorta.
Las variedades autóctonas Hondarribi Zuri y Hondarribi Beltza, procedentes de los viñedos familiares de Getaria y Aia, le dan el aroma y el sabor necesarios, para dar cuerpo al cuerpo y vida a la vida, y poder asi iniciar la vuelta a ese otro mundo que comienza en una mesa bien provista de pescados, mariscos y chipirones "Pelayo" herencia recibida de parte del tatarabuelo Pelayo Manterola, restaurador e inventor de fragancias y texturas nuevas.
Si la aventura iniciada requiere otras navegaciones, este vino siempre acompañara porque es como una nave ligera y segura.