La Historia comienza en 1902.
Don Florencio abre una pequeña churrería en la calle Ave María, siendo uno de los alumnos unos aventajados, Don Galo, su sobrino, que junto a su señora Doña Ana comenzarían instalando Kioscos de churros en fiestas y verbenas, en 1975 se instala en la Plaza Jacinto Benavente como cafetería DOÑANA, y en 1999 su hijo Joaquín da un cambio radical al negocio creando y desarrollando la marca Maestro Churrero que nace con el mismo espíritu que sus predecesores de servicio al cliente.
En 2012 Maestro Churrero continúa su expansión con un nuevo local en la calle Correo 4, para seguir deleitando a sus clientes con su delicioso chocolate con churros.