Fundado en 1930, el Bar Restaurante Kiosco de las Flores, se convirtió en uno de los lugares más famosos entre los amantes del pescaito frito. El secreto se encuentra en la calidad de sus productos y en los setenta años de experiencia que proporciona el punto exacto de fritura que lo ha hecho famoso.
Cualquiera de las sugerencias de su carta son interesantes pero es recomendable no pasar por alto su especialidad en adobo y las puntillitas.