Hotel Llafranch, es un lugar singular y cosmopolita, caracterizado por el estilo familiar, tradicional y peculiar, con un aire artístico y excéntrico. Un símbolo más de identidad, la cocina típica ampurdanesa, y por otro lado, desde hace unos años, el ambiente nocturno se ha reanimado notablemente y las fiestas del gitano han dejado paso a los Shows del cóctel Rambo que Carlos Bisbe ha creado, convirtiéndolo en una atracción de las noches.