El Aeropuerto de Castellón, también conocido como Castellón-Costa Azahar, es un aeropuerto que se ubica en las inmediaciones de Villanueva de Alcolea y Benlloch, en la provincia de Castellón (España). Fue gestionado por la sociedad pública Aerocas, posteriormente por la canadiense SNC-Lavalin y actualmente por la francesa Edeis Management. Pese a haber sido inaugurado oficialmente en marzo de 2011, no recibió todos los permisos para operar hasta diciembre de 2014 y hasta septiembre de 2015 careció de operaciones regulares, convirtiéndose en un símbolo internacional del derroche que precedió al desarrollo de la crisis española de 2008-2016. En octubre de 2016 operaba un pequeño número de vuelos con algo más de 400 pasajeros al día.