Viajar en globo tiene mucho de romántico y aventurero, pero también de técnica y de física: usar un gas mucho más ligero que el aire fue el primer logro allá por 1783 y ahora el secreto está en calentar el aire con un quemador de propano. Y dejarse llevar. Porque aquí no existen reglas, ni rumbos ni caminos. “La gracia del globo es que te lleva donde va el viento y seguro que te lleva a un lugar que no te esperabas y entonces te obliga a conocer, a abrirte y te obliga a disfrutar de la aventura”,
Navegar en el viento y surcar los aires es una manera diferente y única de acercarse a la naturaleza y disfrutarla con otra perspectiva, en toda su grandiosidad. Dehesas, viñas, montañas, riscos, ciudades, ríos, embalses… tienen otra hermosura admirados desde lo alto. Y ahora es más fácil lograr esta mirada gracias a Extremadura en globo y a las diferentes rutas aéreas y servicios que ofrecemos.
La experiencia de un paseo en globo comienza al amanecer con el montaje e inflado del globo. Durante aproximadamente una hora disfrutarás de la sensación de flotar a merced del viento. Cuando aterrizamos, celebramos nuestro vuelo con el tradicional brindis con cava, desayuno típico y la entrega de los diplomas de bautismo de vuelo en globo.
“volar en globo es sentir lo que nunca has sentido. Es poner el mundo abajo y notar que el que se mueve no eres tú, sino la tierra que parece alejarse bajo tus pies. Experimentar una sensación única de calma y silencio. Dejarse llevar ligera y suavemente por el viento. Caminar con las aves, para descubrir un mundo entero de placeres visuales. Esta actividad es una de las mejores maneras de rozar, literalmente, las nubes”.