El Consejo Social está concebido para que, a través de la participación social, la Universidad tenga presente la problemática real de su entorno, en el que desarrolla su misión docente e investigadora. Y a su vez, para que el entorno socioeconómico se aperciba de las necesidades de su universidad y de las potencialidades de desarrollo y progreso que ésta le ofrece.
De este permanente y recíproco conocimiento se busca que derive tanto la evidencia de aportar a la Universidad los recursos precisos para el mejor desarrollo de su vida académica e investigadora, como el encauzamiento de la tarea universitaria hacia la búsqueda de soluciones para los problemas de la sociedad, y la utilización de cuantos logros se deriven de la actividad universitaria, en beneficio de todos.